Las casas de madera, un legado de Sarmiento
Un estilo que aún se preserva en el Delta
“Desde mi llegada a Buenos Aires he buscado en las islas del Paraná un pedazo de tierra adonde retirarme un día como he vivido en mi pobre provincia, a la sombra de los árboles, cultivando plantas y aspirando el ambiente embalsamado de la vegetación y de las flores”.
Ese es el testimonio íntimo de Domingo Faustino Sarmiento sobre el Delta que tanto veneró y donde hasta sus últimos días se recluyó junto con su hijo Dominguito.
Ese es el testimonio íntimo de Domingo Faustino Sarmiento sobre el Delta que tanto veneró y donde hasta sus últimos días se recluyó junto con su hijo Dominguito.
El paso del cuyano marcó a fuego la fisonomía del Delta. Más allá de su romanticismo naturista, fue él quien bregó para que la arquitectura isleña se realizara con la nobleza de la madera de sauce nacida en ese vergel.
“Ni piedra ni ladrillo”, demandó, haciendo a un lado los lujos ornamentales propios del eclecticismo de la época.
“La innovación introducida en las islas es la casita de madera, de fisonomía americana”, instruyó. Y así proyectó su rancho de tres ambientes sobre el río que lleva su nombre, al que bautizó “Prócida” igual que una isla napolitana.
DE LOS ISLEÑOS AL SPA
Las típicas construcciones del Delta fueron uno de los atractivos que hicieron de este lugar un paraíso. En esas casas de madera y de chapa la vida de los isleños, habitantes de la zona, inspiraron películas, literatura y abonaron un imaginario del Delta que aún se mantiene, aunque algunos advierten que podría perderse.
De hecho, entre los vecinos hay cada vez más quejas sobre algunos de los nuevos emprendimientos que no respetan la peculiar fisonomía de las islas.
La casa-museo de Sarmiento, hoy a resguardado detrás de una campana vidriada, es uno de los hitos turísticos de ese Delta que ahora lucha mantener su identidad en comunión con el paisaje natural y con criterios de sustentabilidad ambiental que los emprendimientos premiun respetan, según afirmaron en el ministerio de turismo de Tigre.
“La expansión del Delta que nos interesa es la que mejora y diversifica sus servicios pero la que a su vez cuida la fragilidad de su hábitat y respeta el medio ambiente”, señaló Sergio Massa. Como el Uruguay, el intendente de Tigre hizo del concepto Delta Natural un lema y, a la vez, un arma de defensa para repeler proyectos inmobiliarios que intentaron introducir automóviles, mediante puentes interconectados dentro de las islas.
“El Delta fue, es y seguirá siendo insular, agreste y natural”, repitió Massa cuando se le preguntó sobre el futuro de un mega emprendimiento muy polémico como Colonny Park.
Fuente: La Nación, 27/12
